Los principales rasgos demográficos que caracterizan la población en la zona son:
- Reducido número de habitantes, 13.942, según datos del INE a 1 de enero de 2014, en relación con el número de municipios, 44, destacando la concentración en Almazán, único que se aproxima a 6.000, seguido de lejos por Arcos de Jalón con 1.707, Berlanga de Duero con una población que ronda los 983 habitantes y Medinaceli 767. Al margen de estos municipios, la mayoría de ellos (el 75%) no cuentan ni con 100 habitantes. Esto hace que la densidad de población sea muy baja, 4,11 h/km2, más de veintidós veces menor a la densidad de población de España en la misma fecha (92,68 h/km2), más de seis veces inferior a la de Castilla y León (26,48 h/Km2) y por debajo de la mitad de la correspondiente a la provincia de Soria (8,95 h/Km2). En 30 municipios la densidad de población es inferior al 2%.
- Regresión de la población, que se acentúa especialmente en los núcleos de menor tamaño. Sin perjuicio de la pérdida de población continua que viene sufriendo el territorio desde los años 50 (70,27%), en los últimos 14 años (2000-2014) ha habido una pérdida media de en torno al 15%, siendo en 25 de los 44 municipios superior al 30%.
- Envejecimiento muy acusado de la población, con una tasa que supera el 30%. Sólo Almazán presenta una estructura de población relativamente joven. En 23 de los 49 municipios la edad media es superior a 60 años.
- La estructura de la población queda reflejada a través de una pirámide poblacional regresiva, con una base más estrecha que el cuerpo central y un elevado número de ancianos, debido al descenso de la natalidad, la emigración de personas adultas principalmente por motivos laborales y el envejecimiento de la población.
- Masculinización. El predominio de los hombres es un rasgo común en las áreas rurales cuya actividad económica gira mayoritariamente alrededor del sector primario, siendo territorios que han sufrido de forma intensa el éxodo rural, el cual ha afectado especialmente al colectivo femenino. En el ámbito de actuación de ADEMA, la franja de edad comprendida entre los 16 y los 64 años presenta la masculinidad más elevada aproximándose a 130 (año 2014), lo que significa que hay 130 hombres por cada 100 mujeres de estas edades.
- Población inmigrante. La población extranjera en España ha tenido un incremento considerable en los últimos 20 años, con una tendencia alcista hasta el año 2011 y una disminución paulatina en los últimos años motivada principalmente por la crisis por la que atraviesa el país y que ha supuesto el regreso a su nación de origen de algunos inmigrantes.
A este incremento no ha sido ajeno el territorio del ámbito de actuación de ADEMA donde el colectivo de extranjeros ha saltado de 83 en el año 2000 a 1.344 en 2014, suponiendo un incremento porcentual superior al 1600 %. Con todo ello la población extranjera ha pasado a representar en esta zona el 9,64 % (año 2014), porcentaje que se aproxima al nacional 10,74 % y al provincial 9,04 % y supera al de la CCAA de Castilla y León 5,88 %. En el citado año aproximadamente el 70% de la población extranjera procedía de 4 países: Marruecos, Rumanía, Ecuador y Bulgaria si bien su distribución es desigual en los territorios. Mientras en Almazán predominan los marroquíes (211) seguidos de los ecuatorianos (90), y en Morón de Almazán los búlgaros, en el resto de los municipios son mayoría los rumanos.
En cuanto a su relación con la actividad económica, la estructura de la población incide en que las tasas de dependencia sean muy elevadas (superiores al 70%), con un limitado número de población activa (inferior al 30%).
EN RESUMEN
El territorio del ámbito de actuación de ADEMA ha perdido desde 1950 un 70 % de su población, pasando de 46.895 habitantes a 13.942 en el año 2014 distribuidos en 49 municipios, 5 de los cuales (Almazán, Arcos de Jalón, Berlanga de Duero, Medinaceli y Tardelcuende) concentran el 70% de la población y 33 cuentan con menos de 100 habitantes. La densidad de población es de 4,11 h/km2, un dato que no favorece la realización de las inversiones y merma la prestación de servicios, influyendo en la calidad de viva de los residentes del medio rural, dato que se agrava si tenemos en cuenta que en más del 60% de los municipios la densidad de población es inferior al 2 h/km2.
Se trata de una población envejecida (el 32,15 % de la población tiene al menos 65 años), con predominio de varones que se acentúa en la franja de edad laboral, siendo en este caso la tasa de masculinidad de 126,91. En el territorio, el crecimiento vegetativo es negativo y hay un alto grado de población dependiente (por cada 100 personas en edad de trabajar hay 73,52 en edad no laboral), tasa que se aproxima a 90 si exceptuamos los dos únicos municipios con población superior al 1.000 habitantes. Finalmente un 9,64 % de la población es inmigrante.