En 1997, desde ADEMA se empezaron a tener los primeros movimientos hacia el estudio y difusión de la micología, conscientes de que la puesta en valor de los recursos micológicos podía constituirse en una línea de desarrollo sostenible. Así los primeros trabajos consistieron en un inventario y estudio de la productividad, jornadas técnicas, una guía micoturística, jornadas gastronómicas, etc
Desde entonces, ADEMA ha liderado proyectos de gran interés por la aportación al campo de la micología, tales como el LIFE “Micología y aprovechamiento sostenible” (septiembre 2001- julio 2004), o los de cooperación “Micología y calidad” y “Recursos micológicos y desarrollo rural”, estos últimos subvencionados dentro de las Iniciativas comunitarias Leader II y Leader+.
Y todo ello con el fin de lograr una rentabilidad económica y social que contribuyese positivamente al desarrollo rural.
Todo ello se ha desarrollado en un clima de colaboración, implicando y comprometiendo a administraciones, asociaciones y otros colectivos mediante una metodología altamente participativa.